La conciencia del no saber es una conciencia muy bella, habla desde la humildad. No se trata de un no saber ingenuo, o desprovisto de ciertos entendimientos, se trata de mantener la intención de aprendizaje abierta, con el reconocimiento de que en realidad todo lo que sabes y entiendes hasta el momento es parcial y puede cambiar.
¿Por qué es parcial? La pregunta debería ser ¿cómo puedo pensar que no lo es..? Todo avanza aquí, desde los planetas hasta tus células, todo está en continuo cambio y transformación, en movimiento constante. Los flujos de información son incesantes, y así como la galaxia se mueve en el universo, el planeta dentro de la galaxia se mueve a su vez, así tu y cualquier otro cuerpo se está trasladando temporo-espacialmente, entonces, ¿cómo el entendimiento de algo no se va a mover? ¿cómo lo que ahora conoces tal ves mañana no pueda cambiar?
Incluso lo que piensas de una persona cambia, lo que una persona piensa de sí misma cambia, ¿cómo en este entorno de tanta transformación puedes aferrarte a algo y no sufrir? La tirantez de tomar una idea, una creencia y esculpirla en piedra para mantenerla por los siglos de los siglos, es un intento de hacer que lo que está vivo deje de estarlo, y eso además de ser anti natural, es un mecanismo completamente artificial, porque no se sostiene sin un refuerzo constante.
Puede que encuentres ideas como la del Amor, la cual es una idea perenne, sin embargo, ¿tu entendimiento acerca del amor ha sido siempre igual? ¿Tu experiencia de amor ha sido siempre la misma? Tal vez te preguntes si hay algo que no cambia, algo que permanece más allá de todo este frenesí incesante, y sí, sí lo hay. La conciencia que está detrás permanece, aunque ella en sí misma, también cambia, la conciencia está ahí. Así como a lo largo de tu experiencia estás tú, más allá de los escenarios y personajes que hayas atravesado, tú permaneces, con los cambios que puedas identificar, pero tú sigues estando.
La visión de totalidad, la visión que comprende la unidad, te ofrece un panorama de comprensión que no requiere de coordenadas temporales y espaciales, pues la visión de unidad trasciende los límites. Esta visión ve los cambios y ve la unidad, así como la conciencia que experimenta. Ella en sí misma, te ofrece un parámetro que no es medible y por ende te lleva más allá de todo cambio, que en última instancia, es un contraste, una comparación y una medición.