LECCIÓN 258. Que recuerde que Dios es mi objetivo.

Lo único que necesitamos hacer es entrenar nuestras mentes a pasar por alto todos los objetivos triviales e insensatos, y a recordar que Dios es nuestro objetivo. Su recuerdo se encuentra oculto en nuestras mentes, eclipsado tan sólo por nuestras absurdas e insignificantes metas, que no nos deparan nada y que ni siquiera existen. ¿Vamos acaso a continuar permitiendo que la gracia de Dios siga brillando inadvertida, mientras nosotros preferimos ir en pos de los juguetes y las baratijas del mundo? Dios es nuestro único objetivo, nuestro único Amor. No tenemos otro propósito que recordarle.

No tenemos otro objetivo que seguir el camino que conduce a Ti. Ése es nuestro único objetivo. ¿Qué podríamos desear sino recordarte? ¿Qué otra cosa podemos buscar sino nuestra Identidad?


Comentario:

Lo único que deseo es recordar la relación que tengo contigo Padre. ¿Qué más es necesario cuando todo lo que hace a mi felicidad y a mi Ser se encuentra allí? ¿Qué podría substituir tal plenitud? Que recuerde que Tú no estás lejos, ni fuera de mí, que no eres ajeno ni extraño a mi Ser, sino que mi Ser es una extensión plena y completa de Ti.

Todos los pensamientos, las decisiones y las situaciones que tengo por delante en las horas de cada día, no sean más que un puente, una señal de Tú Presencia en mi vida, en mi mente. Que sólo esté atento al recuerdo de Tu Amor, y como este se expresa, mientras aún estoy en el camino de retorno.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s