«Has aprisionado tu voluntad más allá de tu propia conciencia, donde todavía se encuentra, pero desde donde no puede ayudarte. Cuando dije que la función del Espíritu Santo es separar lo falso de lo verdadero en tu mente, quise decir que Él tiene el poder de ver lo que has ocultado y reconocer en ello la Voluntad de Dios. Gracias a este reconocimiento, Él puede hacer que la Voluntad de Dios sea real para ti porque Él está en tu mente, y, por lo tanto, Él es tu realidad. Si la percepción que Él tiene de tu mente trae la realidad de ésta hasta ti, te está ayudando a recordar lo que eres. Lo único que puede ocasionar temor en este proceso es lo que tú crees que perderías. Lo único que realmente puedes tener, no obstante, es lo que el Espíritu Santo ve.
Un Curso De Milagros. Cap. 9, I
También te puede interesar: Espíritu Santo (7)