«El Amor tiene lugar aquí y ahora, lo cual implica el hecho de que es siempre nuevo, novedoso, fresco. Está vivo, y por ello las formas varían, emergiendo siempre en las condiciones presentes. Esa es su única relación con el tiempo y el espacio. Una condición activa, no localizada, por lo tanto, indeterminable. Solo su experiencia denota su presencia.»